• Ideología,  Seguridad

    EL MITO DEL MÁRTIR ISLÁMICO: DE LA FATWA A LA REALIDAD

    Según Introvigne, resulta muy cuestionable —desde la perspectiva islámica— que un terrorista suicida obtenga el título de shahid (mártir). Si bien ciertos imanes emiten fatwas que respaldan estos actos violentos, la mayoría de expertos y autoridades islámicas no consideran que tal comportamiento sea legítimo. De hecho, gran parte del mundo musulmán reprueba los atentados, especialmente cuando estos causan bajas entre otros musulmanes.

    El problema radica en que el islam carece de una figura única y central para resolver disputas doctrinales, a diferencia de la Iglesia católica con el Papa. Esa descentralización permite que algunos líderes religiosos justifiquen atentados como si fueran operaciones de martirio, ofreciendo a los futuros terroristas una seguridad teológica que, en realidad, dista mucho de ser unánime. Para el suicida, la convicción de cumplir la voluntad de Alá es total; para un análisis más objetivo, su acto se enmarca en la lógica de una organización que persigue fines políticos, no la santidad.

  • DinamicasGlobales,  Ideología,  Totalitarismo

    EL PAPEL DE LA IDEOLOGÍA EN EL TOTALITARISMO MODERNO

    La ideología ha sido siempre un pilar fundamental en los regímenes totalitarios. En el totalitarismo moderno, este elemento ha adquirido aún más relevancia. A través de la difusión de una ideología única e incuestionable, los gobiernos totalitarios consiguen unificar a la sociedad bajo una sola narrativa, donde cualquier forma de pensamiento crítico o divergente es suprimida de manera efectiva. La ideología no solo es una herramienta de control, sino también de manipulación psicológica.

    En muchos casos, la ideología totalitaria se presenta como una verdad incuestionable que justifica la existencia y las acciones del régimen. Esta narrativa simplificada de la realidad lleva a los ciudadanos a aceptar la propaganda sin cuestionarla, facilitando así el control sobre la sociedad. La capacidad del totalitarismo para imponer su visión del mundo y hacer que los ciudadanos internalicen sus valores es lo que lo hace tan efectivo y resistente al cambio.

    ¿Qué hace un pensador crítico? Observa y analiza controlando sus sesgos.